Debes tener en cuenta que vender seguros no es tarea fácil, requerirás de trabajo duro, constante capacitación, gusto por las ventas y determinación. Además, debes contar con facilidad de palabra para saber en qué momento puedes ofrecer los seguros, reconocer esos momentos precisos que pueden ayudarte.
Ten actitud para conocer a tus clientes a fondo y conocer la situación actual de su vida para ofrecer seguros. Estas personas pueden ser gente que acaba de casarse, están esperando un bebé, compraron una casa, perdieron a un ser querido, llegó a la tercera edad, perdió o cambió de trabajo…